El preciado rizoma de jengibre tiene una gran cantidad de propiedades curativas y en Ayurveda se lo considera una “medicina universal”. Conocido como shunthi en sánscrito, y Zingiber officinale en latín, el jengibre es picante y al mismo tiempo es dulce y cálido. Es el antídoto perfecto para el frío y la humedad.
El jengibre se usa tan ampliamente en el Ayurveda que es un botiquín completo en sí mismo. Hay un sutra (versículo) ayurvédico que dice que todos deberían comer jengibre fresco justo antes del almuerzo y la cena para mejorar la digestión. El jengibre no solo aviva el fuego digestivo, sino que también abre el apetito, mejora la asimilación y el transporte de nutrientes a los tejidos corporales específicos y limpia los canales micro-circulatorios del cuerpo.
El jengibre tiene muchos beneficios, que incluyen
Analgésico: reduce la sensación de dolor
Antiemético: ayuda con las náuseas
Aromático: aroma estimulante
Carminativo: alivia la flatulencia
Diaforético: induce la sudoración
Digestivo: estimula el fuego digestivo para ayudar a descomponer y asimilar los nutrientes con más facilidad
Expectorante: ayuda a eliminar la mucosidad
Nervino: calma los nervios frágiles
Sialagogo: aumenta la secreción de saliva
Estimulante, circulatorio: hace fluir la circulación, evita los coágulos
Antioxidante: Reduce los radicales libres y rejuvenece tejidos
Antiinflamatorio: Baja la inflamación (a nivel interno y externo)
Antiapoptótico y Anticáncer: induce la muerte celular programada
Antireumático : Alivia los dolores de articulaciones y la osteoartritis
Aumenta la circulación cardiovascular
Antidiabética: reduce azúcar en sangre
Reduce los efectos secundarios de la quimioterapia
Contraindicaciones
Las pocas situaciones en las que el jengibre está contraindicado son en casos de hiperacidez, durante cualquier forma de hemorragia (incluida la menstruación), vértigo, y enfermedad crónica de la piel.
El jengibre limpia toxinas y facilita la absorción de nutrientes
Aparte de las excepciones arriba expuestas, el jengibre es una excelente especia que se puede utilizar a diario. Los textos ayurvédicos tradicionales recomiendan el jengibre para uso terapéutico para el malestar articular; por mareo debido al movimiento, para limpiar los canales microcirculatorios (srotas) y así facilitar una mejor absorción de nutrientes y una mejor eliminación de desechos.
Durante siglos, el uso tradicional del jengibre ha demostrado ser útil para varias enfermedades, desde náuseas e hipertensión hasta artritis y diabetes. La ciencia moderna, a través de la investigación, respalda su eficacia para ayudar con el mareo, mejorar la digestión y promover la salud de las articulaciones.
Si te atreves a comer jengibre crudo, una buena forma de tomarlo es sumergir dos o tres rodajas finas de jengibre en un poco de sal y jugo de limón y consumirlas antes de una comida principal. Si encuentras que el jengibre es difícil de comer crudo o solo debido a su sabor picante, plantéate agregar dos o tres rodajas finas a tus verduras o lentejas cuando las cocinas.
Estudios sobre el jengibre y el hígado graso
Nunca antes se había realizado en humanos un estudio aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo sobre el jengibre, hasta que en un estudio realizado en 2012 con 44 pacientes que sufrían enfermedad del hígado graso no alcohólico consumieron 1 cucharadita al día y obtuvieron drásticos resultados
La enfermedad del hígado graso no alcohólico (EHGN) es una afección que ha mostrado una gran mejoría con el uso del jengibre. Un estudio indicó que existen varios mecanismos dentro de esta afección crónica que está alcanzando proporciones epidémicas, y la inflamación es uno de los principales contribuyentes.
Existe evidencia de que tomar suplementos de jengibre, o bien, agregarlo en tu dieta podría aumentar la efectividad de las intervenciones del estilo de vida, como la modificación de la alimentación y el aumento de la actividad física, en comparación con el uso de las intervenciones por sí solas.
De hecho, existen pruebas de que el jengibre en cualquier forma puede ser una estrategia esencial para la desintoxicación hepática, así como como una estrategia de apoyo en la obesidad y la enfermedad del hígado graso, dos afecciones que son atribuidas al hígado.
¡¡¡El jengibre protege de pesticidas, metales pesados y radiaciones!!!
Los estudios han demostrado que el jengibre no es solo un apetecible agente saborizante en la cocina, sino también un agente protector contra el daño por radiación y una forma efectiva y económica de combatir las enfermedades
Después de recibir la especial atención de investigadores en todo el mundo, una revisión clínica ha confirmado que el jengibre (Zingiber officinale) sirve como un antídoto viable y un agente protector contra el envenenamiento mortal de agentes tales como pesticidas, contaminantes ambientales, metales pesados, toxinas tanto bacterianas como fúngicas, e incluso algunos productos cosméticos y medicamentos.
El estudio publicado en la revista Food and Chemical Toxicology, reconoce los efectos protectores del jengibre y sus fitoquímicos contra las toxicidades naturales, químicas e inducidas por la radiación.
También posee un “arsenal de metabolitos” con diversos beneficios, que incluyen propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y antiapoptóticas (que inducen la muerte celular programada).
Los investigadores concluyeron que las propiedades del jengibre podrían, y deberían, fomentar un estudio adicional respecto al alivio del daño causado por la radiación y la quimioterapia en los tratamientos oncológicos.
Igualmente debería investigarse otras formas en que podría utilizarse para contrarrestar la toxicidad química de algunas de las toxinas mencionadas anteriormente, así como contaminantes industriales, alcohol, tabaco y medicamentos recetados.
Vitaminas y minerales en el jengibre
El jengibre es una buena fuente de vitamina C, magnesio, potasio, zinc, cobre y manganeso, el jengibre está catalogado como una medicina herbal con efectos carminativos: una sustancia que promueve la liberación del gas intestinal. También es un espasmolítico intestinal, el cual relaja y alivia al tracto intestinal. Eso significa que puede calmar un malestar estomacal, aliviar el vómito y calmar la incomodidad de gases y diarrea, pero también es efectivo para prevenir las náuseas en primer lugar.
Preparado como té caliente, el jengibre suelta los compuestos gingerol y proteasa, originando oleadas de calor que de hecho aumentan la circulación cardiovascular.
Numerosos estudios han demostrado la efectividad del jengibre como un analgésico, pero la forma en la que alivia las náuseas y vómitos tiene que ver con su habilidad para estimular el flujo de saliva. Esto es efectivo particularmente para las náuseas matutinas (muy seguro, sólo se requiere una pequeña dosis) y el mareo (hasta se dice que es mucho más efectiva que el medicamento de venta sin receta Dramamine).
El jengibre reduce los efectos secundarios asociados a la quimioterapia, incluyendo mareos, náuseas, vómitos y sudor frío.
Los estudios también muestran que el jengibre protege contra el dolor de la osteoartritis y varios cánceres, incluyendo de ovarios, colorrectal, de pulmón y de seno.
RECETAS DE JENGIBRE PARA RESFRIADOS Y GRIPES
Cómo tomar un baño de jengibre
- 1/4 taza de jengibre en polvo
- y 1/4 taza de bicarbonato de sodio.
Mezcla y agrega al baño con agua caliente. Sumérgete, respira profundo y disfruta. Las propiedades aromáticas y expectorantes del jengibre ayudarán a abrir tus pulmones, a aumentar la circulación y estimular el calor. Un remedio perfecto para no deprimirse en los últimos días del invierno.
Té de jengibre con limón y miel
- 1 trozo de 1 pulgada de jengibre fresco,
- ¼ de limón en rodajas,
- 1 cucharadita de miel cruda (opcional)
Coloca el jengibre en rodajas en una cacerola pequeña y agrega 3 tazas de agua. Lleva a ebullición, baja el fuego y deja a fuego lento durante 5 minutos. Retira del fuego y deja enfriar a una temperatura agradable. Antes de beber, agrega un chorrito de limón y una cucharadita de miel cruda.
Esta es una excelente bebida para tomar por la mañana o 30 minutos antes de las comidas. Ayuda a encender el agni o fuego digestivo y que fluyan los jugos gástricos, lo que conduce a una digestión más fuerte y que inevitablemente nos lleva a un potente sistema inmunológico.
Al igual que el jengibre, el limón también se clasifica como un estimulante digestivo, activador del Agni y está cargado de vitamina C, que también refuerza el sistema inmunológico. Además, en Ayurveda, la miel, aunque técnicamente es un azúcar, se la cataloga como equilibradora de Kapha.
Infusión ayurvédica para resfriados, catarros, congestión, gripe y enfermedades víricas
- 1 trozo de jengibre de 2,5 cm
- 1 trozo de regaliz picado de 2,5 cm
- 5 granos de pimienta negra enteros
- 10 hojas de tulsi (albahaca sagrada) o albahaca seca
- 2 tazas de agua
Hiérvelo hasta que el líquido quede reducido a la mitad
Infusión de jengibre para fiebre baja y resfriados: favorece la sudoración
- 1 cucharadita de jengibre rallado
- zumo de ½ limón
- una cucharadita de miel
- una taza de agua tibia
Fuentes: Dr. Mercola